Qasr Kharana es uno de los castillos del desierto más conocidos, situado en la actual Jordania oriental, a unos 60 kilómetros al este de Ammán y relativamente cerca de la frontera con Arabia Saudí.

Se cree que se construyó en algún momento antes de principios del siglo VIII d.C., según un grafito en una de sus salas superiores, a pesar de las visibles influencias sasánidas.

Es posible que en el lugar existiera una casa griega o bizantina. Es uno de los primeros ejemplos de arquitectura islámica de la región.

Su finalidad sigue sin estar clara hoy en día. «Castillo» es un término erróneo, ya que la disposición interna del edificio no sugiere un uso militar, y las hendiduras de su muro no podrían haber sido diseñadas como troneras. Podría haber sido un caravasar o un lugar de descanso para los comerciantes, pero carece de la fuente de agua que estos edificios suelen tener cerca y no está en ninguna ruta comercial importante.